Última modificación hace 4 años
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Como probablemente sepas, a poco que hayas leído alguno de mis escritos en este blog, el pequeño miniordenador Raspberry Pi es una de mis plataformas favoritas para todo lo que tenga que ver con la domótica casera y el hogar inteligente.
El precio y la versatilidad de la Raspberry Pi la hacen idónea para un sinfín de aplicaciones.
Pero, vayamos despacio…
¿Qué es la Raspberry Pi?
La Raspberry Pi es un pequeño ordenador muy económico, ideal para utilizarlo en aplicaciones de domótica, puede costar a partir de unos 35€ (aunque ya hablaremos de eso más abajo) y tiene una potencia suficiente para muchas más cosas de las que te puedes imaginar.
Además, su consumo es ínfimo (sobre los 5 vatios a pleno rendimiento), por lo que es ideal para poderla dejar encendida permanentemente sin apagarla nunca (cosa que es normal en sistemas de domótica, lógicamente). Además, no tiene ventilador, por lo que es silenciosa 100%, ideal para que esté encendida 24×7.
Bueno, ya, pero, me preguntarás, amigo mío:
¿Para qué sirve una Raspberry Pi?
Bueno pues, entre otras muchas, puedes utilizar una Raspberry Pi para:
- Controlador domótico (si, esto es de lo que vamos a hablar aquí).
- Dispositivo multimedia para ver películas en alta definición, escuchar música, etc.
- Sistema de videovigilancia
- Centralita telefónica
- PC de sobremesa alternativo
¿Y tú, Mariete, qué usos le das a la Raspberry Pi para domótica?
Tengo en casa varias Raspberry Pi funcionando de forma permanente, llevan años encendidas, y algunas de las cosas que he hecho con ellas son las siguientes:
- Tengo la estación meteorológica, que puedes ver aquí, funcionando en una de ellas. Como la estación meteorológica necesita muy poquita potencia, he utilizado una Raspberry Pi 2, un modelo bastante antiguo, pero que tiene capacidad de sobra. Esa capacidad sobrante la aprovecho para utilizarla también como servidor de puertos USB remotos con VirtualHere, de esta forma no es necesario llevar cables desde la alarma y el receptor de 433 Mhz hasta la máquina virtual con Windows 10 donde se ejecuta HomeSeer (y que es quién realmente utiliza esos dispositivos de forma remota).
- Hay una Raspberry Pi 3 ejecutando Node red y el servidor de MQTT. Es una pieza principal de la casa y su fiabilidad está a prueba de toda duda. A veces está meses seguidos funcionando de forma permanente, noche y día, sin ningún problema. Tampoco le falta potencia para el trabajo que realiza.
- Para la base de datos InfluxDB, donde se almacena toda la información histórica de todos los sensores de la casa (¡y son unos cuantos!), utilizo otra Raspberry Pi 3. Además, le sobra potencia para algunos servicios más de menos importancia como el servidor de infrarrojos MQTT y alguna cosa más.
Tengo además un par de Raspberries más que uso para pruebas, cacharreos o sustituciones.
¿Y, hay varias versiones de Raspberry Pi?
Vale, veo que has estado atento al párrafo anterior, donde he dicho que utilizo varias versiones de Raspberry Pi.
Sí, hay bastantes versiones diferentes, porque su fabricante va sacando modelos nuevos para poco tiempo, pero básicamente las que puedes encontrar en el mercado (por el orden en que a mí me parecen más interesantes):
Raspberry Pi 3
Aunque no es el último modelo, es la que uso para más cosas.
Creo que su relación prestaciones/precio es idónea.
Tiene wifi, Bluetooth, 4 puestos USB 2.0, Ethernet 100Mb
Lanzada en 2015.
Raspberry Pi Zero
Es mucho más pequeña y menos potente que el resto de Raspberry Pi. No tiene Ethernet ni USB, pero si Wifi y Bluetooth. Tiene salida Mini-HDMI.
Un concepto interesante, y estaba prevista para que costara sobre $US5 (si, ¡menos de 5 €!). La realidad es que se está vendiendo por bastante más y, salvo que sea para algo muy particular, creo que no merece la pena su compra, hoy por hoy.
Anunciada en junio de 2019
Raspberry Pi 4
La última (por ahora) de las hermanas
Un salto cuantitativo importante. Es, casi, un PC en un tamaño mínimo.
Doble salida Micro-HDMI con soporte de 4K
Hay versiones con diferentes cantidades de memoria RAM. Con la versión de 4GB de RAM es suficiente para los usos de los que estamos hablando aquí.
¿Y, cuánto cuesta una Raspberry Pi?
Pues, depende…
La Raspberry Pi, como tal, es barata. Su fabricante, la Fundación Raspberry, la concibió para universalizar la informática en todo el mundo, incluyendo muchos países subdesarrollados donde no se podrían permitir ni el más barato de los ordenadores.
El modelo inicial, allá por el año 2012, salió al mercado por 25 dólares. Las versiones siguientes han mejorado mucho su hardware con muy poco incremento de precio. La nueva versión 4 tiene un precio base de unos 35 dólares.
Hay que tener en cuenta que ese es el precio de la placa, para tener un sistema completo habría que sumar: fuente de alimentación, tarjeta Micro-SD, caja, cable HDMI y, en este caso, si, se recomienda un ventilador.
Os he escogido un par de kits de Amazon, uno para la Raspberry 3 y otro para la Raspberry 4, con todo lo necesario, para que no os tengáis que preocupar de buscar los componentes sueltos. Son vendedores con cientos de valoraciones muy positivas. Amazon’s Choice y envío Prime muy rápido.
El software de domótica para Raspberry pi
Ya tenemos nuestra Raspberry Pi. Ahora necesitamos un software para crear nuestra casa inteligente.
Ten en cuenta que las Raspberry Pi no funcionan con Windows (de momento, y con matices), sino con Linux, por lo que, si no estás familiarizado con él, tendrás que ponerlas en marcha siguiendo los muchos videos y tutoriales que hay en Internet.
Si la usas para construir tu hogar inteligente, lo habitual es que, una vez que están funcionando, no se les deje conectado monitor ni teclado y ratón, son de «instalar y olvidar«.
Que no te asuste la palabra Linux. La verdad es que sí eliges la opción correcta y sigues un buen tutorial no te será muy difícil.
Son muchos los programas de Domótica para Linux existentes, tanto gratis como de pago. Entre ellos, destacaría los siguientes:
OpenHAB
Se trata de un programa de automatización del hogar de código abierto.
Una de las grandes bazas de OpenHab es que es totalmente independiente de fabricantes y tecnologías. Casi seguro que, si una plataforma es popular, estará soportado por OpenHAB.
Está desarrollado en Java, por lo que es multiplataforma y su arquitectura es completamente modular.
Tiene una gran comunidad detrás que da soporte y desarrolla incansablemente la plataforma para hacerla crecer.
Su instalación es muy sencilla y su uso, mediante su interface web, es igualmente, muy fácil.
Su configuración es, en general, bastante fácil, pero algunas cosas tendremos que configurarlas mediante la edición de ficheros de texto, lo que puede no ser del agrado de todos.
En la versión 1 de OpenHAB toda la configuración se realizaba mediante ficheros de texto. Ahora, con la versión 2, van permitiendo que cada vez más cosas se configuren desde la interface web, pero todavía falta para que el 100% esté disponible de este modo. Esto significa que, al menos durante algún tiempo, tendremos que configurar tanto mediante la interface web como mediante la edición de ficheros, lo que lo hace menos amigable.
OpenHAB probablemente sea el sistema más potente y flexibles de los tres, pero al precio de una mayor complejidad.
A fecha de junio de 2020 había 386 addons publicados para su integración con dispositivos.
Domoticz
Es un programa de domótica muy extendido.
Es muy ligero, si lo comparamos con OpenHAB y Home Assistant y ofrece una enorme cantidad de funciones.
Su instalación es ligeramente, a mi juicio, ligeramente más complicada que la de OpenHAB y Home Assistant.
La mayoría de la configuración se puede realizar a través de su interface web, aunque no todo.
Domoticz permite hacer lo básico de una forma muy sencilla. Para cosas más complejas la dificultad puede subir.
Uno de los problemas que encuentro a Domoticz (a lo mejor es una sensación mía) es que no está tenido demasiado éxito en número de usuarios y crecimiento de la comunidad por lo que me da la sensación de que se está quedando un poco atrás.
Como extensión del punto anterior, esto ha provocado que no cubra tantas tecnologías, fabricantes y dispositivos como Home Assistant.
Home Assistant
Es el más reciente de los tres y es muy fácil de usar.
Está desarrollado en Python y es fácilmente ampliable mediante plugins.
Su instalación también es muy sencilla. Solamente tenemos que descargar la imagen de la tarjeta SD con su sistema operativo, HassBian, y arrancar desde ella. En pocos minutos nuestro controlador domótico estará funcionando.
La configuración comienza con un asistente que trata de descubrir los dispositivos de la casa que ya están instalados. Si el asistente no consigue descubrir y configurar todos los dispositivos (cosa muy probable) habrá que editar algunos ficheros de texto.
Home Assistant es, en mi opinión, el más sencillo de configurar, aunque también me parece el más rígido de los tres.
Se actualiza muy a menudo y suele incorporar soporte para cosas nuevas muy deprisa.
A fecha de junio de 2020 había 1611 addons publicados para su integración con dispositivos.
El mejor programa de domótica, HomeSeer (para mi gusto)
Al contrario que los tres programas vistos anteriormente, HomeSeer es un programa de domótica comercial (de pago).
También al contrario que los otros programas, este no está disponible solo para Linux, sino que también se puede utilizar en Windows.
Es posible que esté un poco influenciado porque es el programa que uso yo desde hace años (compré mi primera licencia hará cosa de 20 años).
Tiene tantas posibilidades que no voy a poder ni resumirlas aquí, de manera que no lo voy a intentar. Escribiré un artículo sobre él algún día.
Otros programas de domótica y automatización del hogar
Hay muchos otros programas, pero este no es artículo para hablar en detalle de cada uno de ellos. Algunos de ellos son Jeedom, OpenMotics, ioBroker, FHEM, Pimatic, PiDome, HomeGenie…
Resumen de Raspberry Pi y domótica
Suscríbete al blog ahora, si no lo has hecho ya. Tengo pensado escribir más artículos específicos sobre el uso de la Raspberry Pi para crear hogares inteligentes.